El presidente de Brasil, el derechista Jair Bolsonaro, le dio las felicitaciones este domingo a la policía por el cuestionado operativo del jueves pasado en un favela de Río de Janeiro que dejó un saldo de 28 muertos, también denuncias de abusos por parte de las autoridades.
El mandatario afirmó que era un error tratar como «víctimas» a los 27 presuntos criminales que murieron en el operativo.
Según la organización de los derechos humanos este ha sido el operativo más letal de la historia de Rio de Janeiro.
Bolsonaro aprovechó también la oportunidad para criticar a la prensa y los políticos de izquierda.
«Al tratar como víctimas a traficantes que roban, matan y destruyen familias, la prensa y la izquierda los iguala al ciudadano común, honesto que respeta las leyes y al prójimo»
Bolsonaro.
«Es una grave ofensa al pueblo que hace mucho que es rehén de la criminalidad. ¡Felicidades a la Policía Civil de Río de Janeiro!»Bolsonaro.
Jair Bolsonaro se pronunció a favor de la mano dura contra el crimen y considera que aquellos policías que maten a delincuentes tienen derecho a no responder judicialmente por ello.
Así mismo el presidente expresó sus condolencias a la familia del policía que falleció durante la operación.
La acción policial se extendió por nueve horas, las autoridades tenían como objetivo combatir el reclutamiento de menores por parte de una banda de traficantes.
Según los testimonios de vecinos y videos publicados en las redes sociales, durante la operación los agentes invadieron domicilios sin autorización judicial, dispararon a personas que ya se habían rendido y confiscaron los celulares de los testigos.
El fiscal general Augusto Aras, solicitó a las autoridades de la región que «esclarezcan las circunstancias» de la operación ya que hay múltiples denuncias de abusos cometidos por los agentes.
El juez Luiz Edson Fachin, de la Corte Suprema de Brasil, afirmó haber visto indicios de «ejecuciones arbitrarias» en videos que analizó.
La Oficina de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos denunció a las fuerzas se seguridad por obstaculizar que se realizase una investigación al respecto.
La Policía Civil negó todas las acusaciones de abusos y aseguraron haber actuado de forma planificada y bajo la supervisión de la Fiscalía.