El trabajo que realiza la constituyente y que nace en el corazón del pueblo chileno, tiene muchos enemigos
La nueva carta magna que se gesta en el seno de la Convención Constitucional, está siendo asediada por muchos enemigos, con el fin de preservar los puntos más importantes de la constitución pinochetista, en fin, realizar algunos cambios para que todo siga igual.
Ya la Convención prepara un grupo de normas para proteger el debate y sus resultados.
A nivel nacional se ha desatado una masiva campaña en los medios de comunicación impulsada por la oligarquía reaccionaria y las élites del estamento político, con el fin de abortar el proceso constituyente.
Sin embargo, en los trabajos de la comisión encargada de discutir la creación de normas transitorias, se han establecido acuerdos que protegen el debate constitucional y sus resultados, restringiendo las atribuciones que pueda otorgar la constitución vigente a los entes gubernamentales que puedan entorpecer el proceso.
¿Como defender la futura constitución?
La Comisión de Normas Transitorias de la Convención Constitucional se ha convertido en el principal campo de batalla entre las fuerzas reaccionarias y progresistas en el seno de la Constituyente.
No obstante, ya se han acordado normas que, de ser ratificadas en la plenaria, podrán asegurar el respeto a las normas emanadas de la Convención.
Esta constitución tendrá vigencia a partir del 11 de Marzo del 2026.
No podemos olvidar que entre esta fecha y nuestro ahora muchas cosas pueden pasar, por lo que las fuerzas del cambio deberán permanecer alertas ante cualquier emboscada fraguada por el statu quo.
Los proyectos generados por la convención deberán ser aprobados por las dos terceras partes de los congresistas, una zancadilla impuesta por el gobierno de Piñera, pues debió ser por mayoría simple.
Boric será el último presidente que gobierne bajo el manto de la constitución pinochetista.
La reacción ataca
Grupos vinculados al Rechazo de la reforma constitucional, han gastado 164 millones de pesos un publicidad en las plataformas de las redes sociales sin que haya comenzado el lapso para la campaña por el plebiscito.
Estos grupos de rechazo, enemigos de la nueva constitución, desataron sus campañas desde el 2020, año en que ganó el Apruebo.
Los grupos económicos integrantes de la élite política han intentado inocular en el ánimo de la sociedad chilena la idea de una “tercera vía”, misma que no tiene ningún asidero legal, esto con el objeto de apoyar el Rechazo.
Es importante señalar, que la ley establece que el período electoral inicia actividades proselitistas 60 días antes de la elección y que la actividad en la televisión abierta debe esperar hasta el 5 de Agosto, para desarrollar el proselitismo en torno a la aprobación o no de la constitución.
No obstante la idea es oscurecer el proceso a base de desinformación, propaganda malsana y tergiversación de los hechos, con el fin de confundir a los votantes.
Los constitucionalistas, deben enfrentar una reacción que no escatimará ningún esfuerzo para evitar el nacimiento de una nueva carta magna, que ponga en peligro sus privilegios.